El glúteo medio es un músculo importante que rodea y estabiliza su cadera durante el movimiento y le permite levantar el miembro inferior hacia un lado, lejos de la línea media de su cuerpo (un movimiento llamado abducción) y pararse erguido. El músculo glúteo medio está unido a la prominencia ósea de la cadera (llamado el trocánter mayor) por un tendón muy fuerte.
El músculo puede romperse o desgarrarse del trocánter como resultado de una lesión o por fuerzas repetitivas ejercidas durante el atletismo y otras actividades físicas. Los corredores que aumentan rápidamente su rutina en lugar de aumentar gradualmente
la actividad a menudo terminan sobreesforzando el músculo glúteo medio o el tendón. Como tal, esto también puede ocurrir en pacientes mayores donde el tendón se debilita y puede desgarrarse con un “microtrauma” repetitivo. Correr en pendientes o declives o no calentar adecuadamente antes de participar en deportes también puede causar estos desgarros. Si bien algunos desgarros menores o parciales pueden mejorar con opciones de tratamiento conservadoras como el descanso, el hielo y la fisioterapia (especialmente en pacientes que no son muy activos físicamente), el daño más sustancial generalmente requiere cirugía para aliviar el dolor y restaurar la función normal en la cadera.
Los desgarros del tendón del glúteo medio se clasifican por “grados”, con lesiones de grado 1, incluidos los desgarros más leves y el grado 4 que comprende los desgarros más graves. Cuando estos desgarros no se tratan, el tendón puede retraerse y hacer que el tratamiento futuro sea más desafiante. La mayoría de los pacientes con un desgarro tienen una combinación de dolores agudos y dolores sordos persistentes dentro y alrededor de la cadera (generalmente en el exterior de la cadera). El dolor es peor cuando se acuesta del lado lesionado, y la debilidad y la sensibilidad a menudo conducen a la cojera. Los síntomas también tienden a empeorar después de un largo período de pie, sentado o caminando.
El Dr. Martín Estévez realizará una evaluación exhaustiva de sus síntomas y función mediante el examen físico de su cadera. Buscará áreas de sensibilidad e hinchazón, y ordenará pruebas de imagen como radiografías y una resonancia magnética nuclear (RMN) para confirmar el diagnóstico y evaluar la extensión de la lesión.
Cuando hay una rotura completa del glúteo medio, generalmente requiere cirugía para corregir. La inflamación del tendón (tendinitis) o los desgarros parciales se pueden tratar con medidas conservadoras (antiinflamatorios, fisioterapia e inyecciones). La evidencia reciente sugiere que los desgarros parciales tienen un buen resultado con Factores de crecimiento o Plasma rico en plaquetas (PRP).
La cirugía puede hacerse abierta (a través de una incisión de 6 cm) o artroscópica. Por lo general, se prefiere un enfoque abierto para los casos crónicos. El objetivo de la cirugía es volver a colocar el tendón en el trocánter mayor. Mediante la artroscopia de cadera, la cirugía se realiza a través de pequeñas incisiones, minimizando el daño tisular para que la recuperación sea más rápida. Durante el procedimiento, el tendón se vuelve a unir al hueso utilizando pequeños anclajes de sutura. Cuando el daño es más extenso, se puede requerir una incisión más grande (o cirugía “abierta”) para proporcionar un mayor acceso a la cadera.
Cuando el glúteo medio se ha desgarrado durante un largo período de tiempo, el glúteo mayor (un músculo más grande que cubre el glúteo medio) se puede transferir (cambiar la inserción del tendón) restaurando la fuerza y la función de los abductores de cadera.
Después de la cirugía, deberá usar muletas y un aparato ortopédico para la cadera durante las etapas iniciales de curación, y su actividad estará restringida durante 6 semanas para que el tendón pueda sanar adecuadamente. La fisioterapia desempeñará un papel importante en la recuperación, fortaleciendo la cadera y evitando la acumulación de tejido cicatrizal que puede interferir con la función normal de las articulaciones.
Las roturas tendinosas del glúteo medio suelen causar un dolor significativo, pero no son la única causa del dolor de cadera. El dolor de cadera, incluso molestias relativamente leves, puede ser un signo de un problema subyacente grave. Tener el dolor evaluado y tratado lo antes posible es importante para aliviar sus síntomas, y también es importante para garantizar que disfrute de un rápido retorno a lasactividades que ama. Para saber qué está causando su dolor de cadera, y cómo se puede tratar, contacte al Dr. Martín Estévez en Recoleta, Buenos Aires para programar una consulta donde recibirá el diagnóstico correcto y todas sus opciones de tratamiento.